El incumplimiento de contrato es una situación jurídica que puede darse en diferentes modalidades contractuales, y que habilita a quien se ha visto afectado por él a resolver el pacto e incluso a exigir una compensación por los daños sufridos.
Como existen diferentes tipos de obligaciones, debes tener en cuenta que el incumplimiento contractual puede llegar a producir efectos muy variados y son los siguientes.
¿Qué es un incumplimiento de contrato?
Incumplir un contrato implica dejar de atender a las obligaciones derivadas del pacto entre dos partes que se había alcanzado.
Un contrato no deja de ser un acuerdo entre dos partes que genera derechos y obligaciones para ambas. Cuando hay un incumplimiento, lo que se produce es una ruptura de ese compromiso, causando un daño a la parte que sí ha cumplido.
El incumplimiento de las obligaciones recíprocas puede ser total o parcial. Es decir, el sujeto puede dejar de cumplir todo aquello a lo que se había comprometido, o solo una parte de la obligación.
En cualquier caso, la realización incompleta del compromiso adquirido da lugar a que la otra parte pueda tomar medidas para proteger sus derechos.
¿Qué pasa si hay un incumplimiento de contrato?
Cuando una de las partes deja de cumplir los términos estipulados en el acuerdo, la parte que se ha visto agraviada puede acudir a los tribunales a pedir:
- El cumplimiento de la obligación.
- La rescisión del contrato.
- Una compensación por los daños que le ha causado el incumplimiento contractual.
Aunque la Ley determina qué podemos hacer en cada caso concreto de incumplimiento contractual, es común que sean los propios contratos los que determinen qué derechos asisten a la parte que se ve perjudicada cuando la otra deja de cumplir con sus obligaciones.
Tipos de incumplimiento de contrato
Incumplimiento de contrato laboral
Cuando se trata de un contrato de trabajo, si la parte incumplidora es el propio trabajador, el empleador queda facultado para llevar a cabo un despido.
Por ejemplo, si una persona llega tarde de forma reiterada a su puesto de trabajo, está faltando a su compromiso de cumplir con un determinado horario y, en consecuencia, puede ser despedida por ello.
Cuando es el empresario quien incumple su obligación, es la legislación laboral (Estatuto de los Trabajadores) la que determina qué consecuencias tendrá cada caso concreto.
Así, si un empresario incumple su deber de respetar los derechos de sus empleados, y lleva a cabo un despido no amparado en ninguna causa legal, este será declarado nulo y se verá obligado a readmitir a esa persona en su empresa.
Una de las características de los incumplimientos de obligaciones en materia laboral es que, en la mayoría de los casos, antes de poder acudir a los tribunales, se exige pasar por actos de conciliación.
La mediación es un sistema extrajudicial de resolución de controversias que intenta que las partes lleguen a un acuerdo que evite que tengan que resolver su conflicto ante la autoridad judicial.
Incumplimiento contrato de arras
El contrato de arras es muy habitual en la compraventa de bienes que tienen un precio alto, como los inmuebles. A través de él, ambas partes se comprometen a cerrar el negocio jurídico en el futuro.
Aquí el incumplimiento da lugar a una responsabilidad objetiva, ya que puede causar importantes daños a la otra parte. Supongamos que dos personas acuerdan la compraventa de un inmueble que celebrarán un mes después cuando el comprador haya finalizado los trámites con el banco para poder acceder a un préstamo hipotecario.
Podría ocurrir que, al llegar el momento de la firma del contrato, el vendedor haya traspasado la casa a otra persona. O que el comprador no haya obtenido financiación suficiente.
En ambos casos, hay incumplimiento que frustra las expectativas de la otra parte.
El contrato de arras implica la entrega de un dinero por parte del comprador al vendedor en concepto de señal. Así, el comprador adquiere el compromiso de adquirir el bien en el futuro, y el vendedor la obligación de transmitírselo.
El propio contrato prevé que, en caso de incumplimiento, las arras operarán como indemnización. Si incumple el comprador, el vendedor se queda con el dinero entregado como señal. Si incumple el vendedor, el comprador puede exigir la devolución de las arras más un porcentaje sobre las mismas.
En caso de que el vendedor no devuelva las arras ni pague la compensación pactada, el comprador puede acudir a un proceso monitorio.
Incumplimiento del reconocimiento de deuda
De los contratos de prestación de servicios (entre otros), se pueden derivar deudas, y respecto a estas se puede celebrar un contrato o documento de reconocimiento de deuda, que suele hacerse para evitar gastos judiciales.
Lo habitual es incluir, en este tipo de contratos, alguna cláusula que se refiera a las consecuencias del incumplimiento contractual. Por ejemplo, estableciendo la cantidad que ha de abonarse en concepto de daños y perjuicios si se deja de cumplir lo pactado.
En la venta de bienes y servicios, en una relación laboral, en un alquiler de vivienda… El incumplimiento de contrato puede darse en muchas relaciones jurídicas. Afortunadamente, la normativa regula qué debe hacerse en cada caso concreto para ser compensado por el perjuicio sufrido. Si tiene alguna pregunta sobre este tema, póngase en contacto con nuestros asesores fiscales en Barcelona.
